Semana 39.3. El Casamiento


   Llegó el momento más esperado de la reparación. Después de muchos meses separados, y de recibir ambos reparaciones importantes en cuanto a su estructura, por fin van a unirse de nuevo.

   Debo confesar que estaba muy nervioso y asustado, ya que era la prueba de fuego de la reparación, el chasis tendría que casar perfectamente con la carrocería, de lo contrario, las reparaciones anteriores no hubiesen servido de nada. No me imagino otra vez desmontando un estribo para reajustarlo... ¡Que miedo, con el trabajo que lleva eso y el nulo tiempo que tengo!

   Con la carrocería en el elevador y el chasis debajo, nos disponemos a bajarla procurando centrarla de la mejor forma posible... 


   Abajo...

   Abajo...

   Abajo...

   Poco a poco...

   Un poquito más...

  ¡YA ESTÁ!






   Como se pueden apreciar en las imágenes, ¡CASA PERFECTAMENTE! Menudo alivio...

   Lo único que se le hizo fue el agrandar algunos orificios del chasis para que los tornillos entrasen bien, ya que los suelos, al no ser originales, no vendrían perfectamente colocados los orificios.

   La goma de estanqueidad que trae entre el chasis y la carrocería no se la puse porque habría que separar de nuevo chasis-carrocería para el posterior pintado.



Semana 39.2. Imprimación fosfatante y antigravilla



   El desabollado importante de la carrocería ya está concluido, Sólo falta el techo, puertas y pequeñas abolladuras que se repasarán más adelante, pero otro, ya que por culpa del tiempo que se nos ha echado encima no nos dará tiempo a terminar.

   El siguiente paso es la protección. Para ello utilizo imprimación fosfatante, ya que tiene un poder protector contra el óxido muy elevado.

   Con la imprimación ya seca, procedemos a perfilar los pasos de rueda para pintar tanto ellos como los bajos de la carrocería con imprimación antigravilla.







Semana 39.1. Desabollado y sellado de la carrocería


   Ahora que ya la superficie está protegida y homogénea de forma visual y al tacto, es hora de alisar las imperfecciones en la reparación con masilla de poliéster. No sin antes sellar todas las zonas de unión y llagas con selladora a brocha, tal y como realizamos en los trabajos en el chasis, a fin de proteger de la oxidación todos los poros y zonas propensas a condensar humedad de las soldaduras y recovecos de la carrocería.








   A fin de evitar desagradables ruidos, vibraciones y reforzar en mayor medida el panel lateral frente al pandeo, le coloco cortando a medida un trozo de tela asfáltica autoadhesiva. Para mejorar el agarre del pegamento, a medida que pego voy calentando un poco tanto la superficie como la zona del pegamento de la tela asfáltica, para así mejorar la adherencia y flexibilidad a la hora de adaptarse a la superficie. 
Nota: Hay que tener cuidado a la hora de aplicar calor, ya que un exceso del mismo en la carrocería puede ocasionarle ampollas a la imprimación, y un exceso en la tela asfáltica puede estropear el pegamento. entre 50 o 70 Cº sería lo ideal aproximadamente.